06 marzo 2017

Los cuentos de una vida (4 años)

Los alumnos de 4 años hemos continuado con los cuentos y hemos realizado actividades basadas en ellos. De esta manera hemos conocido la fábula de “El burro flautista” de Tomás Iriarte, en la que además de aprender vocabulario nuevo, hemos descubierto que hay diferentes tipos de flautas y con ellas se pueden emitir sonidos suaves o fuertes. En esta ocasión nos la hemos aprendido y la hemos cantado. Aquí podéis ver el resultado.

          

Otro de los cuentos que hemos descubierto ha sido “In het bos van de Luiaard", Anouck Boisrobert y Louis Rigaud, (“El bosque”), con el que hemos aprendido la importancia que tiene cuidar la naturaleza. Nosotros con motivo de este cuento, plantamos lentejas dentro de una caja transparente de cd, donde pudimos observar su crecimiento y sus partes principales.
A continuación vais a poder ver el cuento, cómo plantamos las semillas, y  cómo se veían estas  cuando comenzaron a crecer.


Uno de los cuentos que más nos ha gustado ha sido “La ovejita que vino a cenar” de Steve Smallman. Es un cuento entrañable, que además nos lo contó nuestro querido amigo el “Mago de la palabra” (Proyecto Botín), con el que hemos disfrutado dramatizándolo y musicalizándolo entre todos. Unos hemos hecho el sonido de las tripas de la ovejita, de sus tiritonas, el hipo o los ronquidos. Aunque no ha sido fácil gravar nuestras actuaciones, esto podría ser un ejemplo de nuestros momentos de representación.


A través de los cuentos, hemos aprendido que tenemos que desligarnos y dejar atrás algunas cosas para seguir creciendo. Esto lo conseguimos gracias al cuento “No te vayas” de Gabriela Keselman y lo pusimos en práctica realizando una sesión de rincones en los que tuvimos que decir adiós al folio en blanco para poder escribir letras, dijimos adiós a una construcción para poner realizar otra o dijimos adiós a unos juguetes para poder sacar otros.

                                                             

Gracias al cuento “No es fácil pequeña ardilla” de Elisa Ramón, pudimos acercarnos a ese tema tan difícil como es la muerte, y a través de él florecieron sentimientos sobre los que dialogamos y reflexionamos. Además, con ayuda, en nuestras casas dibujamos dentro de una estrella un familiar cercano que ya no está entre nosotros, en la asamblea explicamos quién era y después las colocamos a modo de cielo, para tenerles presentes y cerca de nosotros.



Y precisamente fueron los cuentos los que nos acercaron a las matemáticas. Con el cuento de “La mosca Fosca” de Eva Mejuto, hemos valorado la importancia de compartir a la vez que trabajábamos los ordinales, aunque la actividad estrella fue la elaboración de la tarta de la mosca Fosca.






Como colofón final, el cuento “La ratita presumida” de Charles Perrault, que ha servido de guía a la UNIR (Universidad Internacional de la Rioja) representada en Blanca Arteaga y Jesús Macías, para trabajar las figuras geométricas, la clasificación, la seriación, el conteo, la resolución de problemas, las secuenciaciones temporales…
Muchas gracias a la UNIR, a Blanca y a Jesús, por vuestro trabajo, vuestro esfuerzo y vuestro tiempo.